martes, 16 de noviembre de 2010

Acariciando los testículos, y cuestión de huevos

Un muchacho estaba recostado en la cama junto a su nueva pareja.
Después de haber tenido su primera sesión de sexo, ella se pasó una hora acariciándole los testículos.
Algo que ella parecía disfrutar enormemente.
Mientras él lo disfrutaba en la misma forma, se volvió hacia ella y le preguntó:
- ¿Por qué te gusta tanto acariciar mis testículos?
Y ella con voz tierna le respondió:
- Porque extraño los míos.


(ESTO ESTA SACADO DE UN FORO DE INTERNET)

Resulta que llegamos el otro día a una terraza de un bar en mi pueblo (Griñón) con el A6, mi mujer y yo.
Aparco justo enfrente de las mesas y sillas y al lado de un pedazo de mercedes 600 SEL V12 con matricula M-....-NM. O sea que, si no me equivoco, es de 1992 más o menos.
Bueno, a lo que vamos, nos sentamos junto enfrente de los dos coches y creo que el dueño era un cincuentón que estaba tomando algo con su mujer a nuestro lado.
En esto llega un 206 'ultrastreetrayotunnig' en un color inexplicable y todo reluciente y lo típico: con las ventanillas bajadas y la música de máxima FM a tope y pegando acelerones para que se oyeran sus 'maxmegatubarros'.
Va el tío y aparca en doble fila detrás (en gran parte) del mercedacos y del mío. Se bajan dos pimpines con los pelos despeinados hacia arriba y engominaos hasta el culo, se quedan mirando el Mercedes y mi A6 y van a sentarse en la mesa de al lado con otros tres colegas que ya estaban en la terraza.
A la que venían a sentarse, el hombre del Mercedes le dice educadamente al chico que le quite el coche que va a salir.
El nene le dice que 'sí, que ahora mismo' y entre risas con sus amigos comenta por lo bajini que 'una mierda, que mucho coche pero que le va a tocar esperar un ratito'.
Mientras el se regocija con sus amiguitos, los cuales también se partían el culo, el cincuentón del Mercedes con el coche ya un rato encendido le toca el claxon y le dice que haga el favor de quitárselo y el niñato le dice 'que te esperes hombreeee, tanta prisa y tanta polla' (palabras textuales) y el crío sigue bebiéndose su caña con los amigos, de fondo, partiéndose el culo.
(Ahora viene lo bueno)
El tío del mercedes mete marcha atrás y acelera a tope con los 408 CV que tiene el bicho (si no me equivoco) y le mete al 206 un estacazo del copón empotrándole toda la puerta del copiloto para dentro medio metro por lo menos.
Yo, y todos los de allí, nos quedamos así, menos el crío del 206 que se quedo blanco. Se abalanzan sobre el viejo todos los chavales, y tres o cuatro tíos que estábamos allí les paramos los pies.
El dueño del 206 le empieza a gritar al del mercedes 'que si está loco, que si tal'....
El cincuentón se baja tranquilamente (la mujer ni se menea, se queda sentadita) y le suelta al chaval 'que creía que ya se lo había quitado y que no había visto el coche' y le dice - para mi - la frase del siglo (al loro):'MIRA, HIJO: PARA SER CHULO EN ESTA VIDA HAY QUE TENER COJONES Y DINERO. Y ahora saca los papeles, que hacemos el parte y, no te preocupes, que la culpa la he tenido yo. Pero tu coche se va ha quedar un mesecito en el taller, un poco más de lo que tu me has hecho esperar a mi'.

Impresionante la gente hasta aplaudía, el niñato no sabia donde meterse y creo que no va ha olvidar esa frase en su vida.
Je,je... fue para verlo, casi le pido un autógrafo al del mercedes, mi héroe, y hasta a la mujer, que ni siquiera hizo gesto de preocupación. (A todo esto decir que el mercedes ni siquiera se abolló. Sólo unos rasguños de la inexplicable pintura del otro y ya está. Vamos, ni comparación con lo que le hizo al 206).

1 comentario:

  1. Asturianes

    Dos amigas se suben al tren en Sama con destino Gijón. Una de ellas encuentra en su asiento una revista de Interviú, se pone a ojearla y
    observa que en las páginas centrales en lugar de chicas desnudas hay chicos despelotados. Asombrada le dice a su amiga:
    - ¿Mira esti?, ¡vaya rabu que tien!. ¿Y esti otru?, ¡vaya cipote!. ¿Y esti ?,¡vaya mangu!. Mi madre...

    La amiga un tanto avergonzada le dice:
    - ¡Ay fia!, ¡Vaya ordinaria y aldeana que yes!

    Esta le responde:
    - ¡Ay madre! ¿Por qué?.

    - Porque no son: rabus, ni cipotes, ni mangus. Son penes.

    Y esta le responde:
    - ¡Penes!. Penes serán pa Ti. Pa mi son alegries.

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